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FUMPAMNUSSES!

¿Qué es Fumpamnusses!?... Fumpamnusses! es todo y es la primera vez. Siempre hay una primera vez. Escribo pues, por primera vez, en algo que tiene que ver con el exabrupto digestivo de un sapo ("Blog") sin saber siquiera lo qué es (me refiero al Blog, aunque en el fondo tampoco sé muy bien lo que es un sapo.) Mi declaración de intenciones espero que sí quede clara: me limitaré a realizar las veces que crea oportuno un ejercicio brusco, continuado y compulsivo de literatura automática, de exorcismo necesario y suficiente de los restos de energía negativa o positiva, qué sé yo, o de encauzamiento de ideas, frases o palabras que mi mente quiera en ese preciso momento que queden reflejadas en este nuevo e inefable invento. Invito, pues, a este ejercicio a todos los interesados en el arte de la improvisación mecánica, maquinal, indecorosa y pueril. No esperen grandes ideas, no espero grandes ideas, sólo el placer de ver concatenadas ciertas imágenes que surgen improvisadamente y en plena libertad, quizás en extrema libertad, esperanzado en que no me suceda algo tan lamentable como aquello que le ocurrió a aquel pequeño electrodoméstico que, de tan libre y tan enamorado como estaba de Sir Douglas H. Silverstone, declaró la independencia de todas las anguilas del mundo y de ciertos huevos de Pascua de los alrededores de Castel Gandolfo.



8.9.10

176. Bestiario 03


          BORMOG: Es homúnculo de la orden de los bombios. Es el más redondo de ellos, el más innecesario también. Es ser urbano, de metrópoli industrial, de ámbito factoril. Vive en polígonos industriales, grandes naves chatarreras, desmontes de deshechos fabriles. Su aspecto entroniza y se mimetiza a la perfección con su entorno natural. De lejos semeja un neumático de camioneta de reparto de los años cincuenta. Su movimiento giratorio, sin embargo, no lo realiza con la zona de aspecto recauchutado, sino con la zona central de aspecto metálico-herrumbroso. Vive del hurto de alambre y de bobinas de cobre. Suelen ir en parejas o tríos y emiten, al desplazarse, sonidos hirientes y recalcitrantes, muy desagradables para los obreros y operarios que se encuentran cerca de ellos. El bormog ejecuta ciertas danzas de apareamiento nocturno muy ricas en matices, casi se diría que tales sutilezas devienen paradójicas en un ser de tan baja prestancia estética. Su vida es longeva pero muy pobre en consecuencias beneficiosas para la Naturaleza. Sólo depreda material siderúrgico, nada más hace con su vida. No mantiene relación con ninguna otra bestia y su carácter, hosco y huraño, no lo tipifica como un ser redondo, pero sí como ente despreciable.