+

FUMPAMNUSSES!

¿Qué es Fumpamnusses!?... Fumpamnusses! es todo y es la primera vez. Siempre hay una primera vez. Escribo pues, por primera vez, en algo que tiene que ver con el exabrupto digestivo de un sapo ("Blog") sin saber siquiera lo qué es (me refiero al Blog, aunque en el fondo tampoco sé muy bien lo que es un sapo.) Mi declaración de intenciones espero que sí quede clara: me limitaré a realizar las veces que crea oportuno un ejercicio brusco, continuado y compulsivo de literatura automática, de exorcismo necesario y suficiente de los restos de energía negativa o positiva, qué sé yo, o de encauzamiento de ideas, frases o palabras que mi mente quiera en ese preciso momento que queden reflejadas en este nuevo e inefable invento. Invito, pues, a este ejercicio a todos los interesados en el arte de la improvisación mecánica, maquinal, indecorosa y pueril. No esperen grandes ideas, no espero grandes ideas, sólo el placer de ver concatenadas ciertas imágenes que surgen improvisadamente y en plena libertad, quizás en extrema libertad, esperanzado en que no me suceda algo tan lamentable como aquello que le ocurrió a aquel pequeño electrodoméstico que, de tan libre y tan enamorado como estaba de Sir Douglas H. Silverstone, declaró la independencia de todas las anguilas del mundo y de ciertos huevos de Pascua de los alrededores de Castel Gandolfo.



14.7.09

47. Ropa de entretiempo


          El arúspice de Quebec es un hombre tierno, de carácter amable y sumiso, culto a su manera, buen padre y amigo de sus amigos. Su esposa es de ascendencia galesa y se llama Flora, de soltera Tillson. Él, oriundo de la región de los lagos, se llama Thomas Samuelsson. A los cuarenta y cinco años dejó su puesto de dirección en el departamento de recursos humanos de la Canada United Oil y se consagró a su pasión por la adivinación del futuro, convirtiéndose al poco tiempo en el arúspice de Quebec. A Flora le dolió que su marido abandonara el envidiable y muy bien remunerado cargo que ostentaba en la compañía, pero con el paso de los meses se acostumbró al cambio. Ya han pasado desde entonces diez años. Flora está preocupada porque vuelve a notar a su marido inquieto y caviloso. Hace unos días le habló de que le gustaría ocupar el puesto vacante de farero en Peggy's Cove, pequeña aldea situada en Nueva Escocia, cerca de la ciudad de Halifax.

No hay comentarios:

Publicar un comentario